Hola. Soy Marta de Celis. Soy fisioterapeuta y una semana más te cuento algo.
Llegó la primavera y en lugar de alterarnos la sangre, tal y como dice el dicho, lo que a veces nos altera es nuestro suelo pélvico.
Si padeces alguna disfunción de suelo pélvico, prolapso o incontinencias, y además la primavera te hace toser o estornudar más; es muy probable que puedas notar cierto empeoramiento en tus síntomas.
La tos repetitiva o los estornudos producen un gran impacto en tu suelo pélvico.
Lo que ocurre es que hay un aumento de presión en el interior de tu cavidad abdominal que repercute directamente empujando a tu periné.
Esto hace que si tu musculatura no es competente, el órgano prolapsado (vejiga, útero o recto) descienda con fuerza hacia el canal vaginal. Puedes notar en esta época mas pesadez en tu vagina o la sensación de un tampón mal puesto o incluso que la víscera sale de tu vagina.
Además puede pasar que no puedas contener la orina o gases en ese momento de aumento de presión súbito y tengas más escapes.
Si tienes alergia y padeces una disfunción pélvica, estás embarazada o estás en tu periodo postparto, o tras una cirugía abdominal o ginecológica; es importante que te protejas ante esos episodios de tos o estornudo.
No por no tener ninguna patología no debes tener en cuenta estos consejos, ya que estarás previniendo tenerlas en un futuro, ya que la alergia es un factor predisponente.
Seguro que entonces te interesa saber qué hacer.
Lo más importante es que tengas conciencia sobre tu musculatura perineal. Debes saber contraer tu suelo pélvico. Pero además es interesante que también actives tu musculatura abdominal profunda.
Qué pasos debes seguir cuando notes que viene una tos o estornudo:
- Crece. Es decir, si te autoelongas, tu musculatura actúa de forma más eficiente. Eso hace también mantener tu pelvis en mejor posición.
- Contrae fuertemente la musculatura de tu suelo pélvico antes de que se produzca la tos.
- Mete ombligo (esto es activar tu transverso abdominal).
Intenta mantener estos pasos durante toda la tos o estornudos, es decir, no cambies la postura, no te flexiones y no aflojes la musculatura.
Al principio puede resultar difícil. Deberás entrenarlo y pensarlo mucho antes de hacerlo. Pero la repetición hace que se consiga el automatismo, y lograrás que ya no tengas que acordarte de hacerlo porque tu cuerpo lo hará solo de manera refleja. Lo habrá aprendido.
Si lo consigues automatizar ayudarás a tu suelo pélvico a mantener a raya los síntomas y evitar un empeoramiento en tu disfunción.
Pero recuerda, no esperes a tener síntomas para ponerlo en práctica. ¡Merece la pena!
Nos leemos, hasta el próximo post.